Esta pequeña melancolía
que guardo abrazo y hago mía.
Esta pequeña melancolía
que fumo bebo y transpiro
noctámbula, epitelial.
Esta pequeña melancolía
tan ajena, tan cercana
tan pegada en las plantas de los pies
y las cuerdas vocales.
Tan cercana tan maldita
tan fortuita e inconclusa.
Mi pequeña melancolía
ayer nos tomamos el té
y recuerdo que me dijiste
(más cercano a un grito que a un pensamiento)
lo mucho que te avergonzaba
mi intento de arlequín
mis antojos por ser una postal de Navidad.
Querida mía
no pretendí perder-nos
pero, son días de escasas nubes
escasas arterias removibles
escasa conciencia colectiva
y he decidido caminar más liviana
perdón por dejarte en la parada
ten la seguridad
que cuando deba pagar las facturas
regresaré por ti.
Ilustración de Paula Bonet