lunes, 23 de abril de 2012

Fantasía infantil


Hoy la vida es como el hilo que colgaba de aquella carpa,
Esa que renacía de las mangas de un transeúnte callado y sucio,
Sombrillas, viejos leones, sombrillas, sombrillas… estiércol
Pero al menos era nuestro… era nuestra miseria, nuestra triste magia.
Hoy fui a visitar la carpa, y sólo queda la enfermedad de los leones
Y una desolada banca, los espectadores también se han marchado.
Podríamos buscar espectáculos en los pozos de coka que dejas en cada vaso  
Y seguir asesinando nuestros pulmones, como cuando éramos niños…

domingo, 22 de abril de 2012

Intangible-instantáneo


Si el aire fuera seda
Y el lodo carne…
Si los lotos nacieran en sus manos
Y el perdón creciera sin agua…
Si al caminar asesináramos recuerdos
Y al amar encontráramos  alas…
Si la sangre dejara de ser un precio
Y la dignidad una guerra….
Si las moscas dejaran de golpearse en las ventanas
Y las casas nos tuvieran puertas…
Si el cielo dejara de ser un reflejo religioso
Y la moral dejara de ser la puta de las ratas…
Si en los cajones no se formaran motas
Y lloviera tinta…
Si la memoria dejara de ser un pretexto
Y los muertos epitafios enraizados…
Si las marionetas lloraran
Y los espejos se quebraran…
Si la belleza la consumieran las polillas
Y sólo quedara tu espalda…
Si aprendiéramos a vivir
Y la tristeza fuera música y letras… y no despedidas.

domingo, 8 de abril de 2012

otra puta nota

Cada hoja que cae sobre el camino forma esa misma silueta,
Aquella que en tardes frías termina por congelar mis pies.
No puedo huir con una guitarra al hombro e instalarme en las copas de los árboles,
Perderme entre las pinceladas del cielo inexacto y fundirme entre la espesura del mundo…
Por qué no encuentro la respuesta de la vida y mientras tanto ella se escapa entre la brisa
De estos abriles insoportables.
Jamás mis rodillas tocaron el suelo, por qué ahora mi cuerpo está cubierto de heridas,
Por qué ahora mis manos se arrastran al igual que mis ojos…
Por qué ahora me niego a salir de aquí,
Por qué le temo al mundo,
Por qué mis raíces me atan a esta inercia,
Por qué no puedo simplemente huir con un viejo libro y una tonelada de tinta,
Reescribir mi camino y arrastrar las hojas secas de abril a la puerta de quien merece cargarlas.